El algoritmo de YouTube me tiene fascinado. Gracias a mis visualizaciones ha conseguido acertar en las sugerencias. Alguna vez me propone algún vídeo facha, pero en general me trae buen contenido.
Esta vez me ha llegado una maravillosa entrevista de El Pollo Vignolo a Lionel Messi en Fox Radio.
Jamás imaginé que el argentino fuese tan buen conversador. En esta entrevista me ha sorprendido gratamente con una naturalidad que solo muestra cuando regatea rivales sin tan siquiera echar la vista atrás. Cierto es que la habilidad del periodista es fundamental para hacer que Messi no se sienta cohibido.
En esta gran tertulia repasan varios puntos en la carrera del mejor jugador del mundo, pero un tema recurrente son sus hijos.
Me he sentido muy identificado con Messi porque cuando eres padre tus hijos se convierten en el centro de tu vida, y no es diferente para él. Da igual el tema del que hablen, al final acaban hablando de Thiago, su hijo mayor.
Aquí os dejo algunas de las frases que más me han llamado la atención, aunque la entrevista es muy rica en contenido. Al final dejo el video.
«No me gusta verme. Me da vergüenza. Ahora con Thiago (su hijo mayor) me veo más porque le gusta ver vídeos de fútbol en la tablet»
«Hago una vida normal. Por la mañana llevamos a los niños al colegio, voy a entrenar y después los vamos a buscar. Todas las tardes tienen actividades y hay que llevarlos. Después la ducha y la cena. A las 21:30h ya estamos en la cama»
«Las derrotas siguen doliendo, pero ya no es como antes cuando estábamos solos Antonella y yo; me encerraba en el cuarto y no tenía ni ganas de comer. Ahora llego, veo a los niños y a Antonella y se me pasa»
«Me gusta llevar a los niños a entrenar. Nos juntamos con Suárez y su familia y la pasamos bien viendo a los chicos y tomando mate»
«Mi hijo está todo el día pidiéndome ir a jugar a fútbol a la playa, y al final tengo que ir»
«Thiago no quiere que le llamen Messi. Dice que el es Thiago. Está harto de que se acerquen a hablarle pibes mayores que no conoce de nada»
«Antes llegaba de entrenar y me ponía a jugar a la PlayStation durante horas. Antonella no se daba cuenta de que había llegado. Ahora ya no. En Barcelona nunca estoy solo. Estoy pendiente de los nenes y no me queda tiempo para jugar»
«Me gustaría jugar en Argentina pero no depende de mí, tengo familia y no es tan fácil. Mis hijos tienen un grupo de amigos bárbaro que no quisiera romper. Se conocen desde los tres años… Me llevo muy bien con el grupo de padres»
Más interioridades del fútbol en mi libro Fútbol B