"Joderos, hijos de puta"
Confesiones con el cura del Southampton
Vivir un sueño y no ser consciente
«Pero tú jugaste en la Premier»
«…jamás volveré a pasar hambre»
No hay diferencia entre ir a jugar a China que a Malta
Coche de Futbolista
El futbolista joven vive en un mundo anacrónico
Cómo perdí fans a los 19 en Southampton sin saberlo
Pensaba que llenar el armario era la solución
No merecía subir en un Ferrari
Apenas llevaba un mes en Southampton y mi coche no había llegado todavía de Barcelona, andaba en medio del mar en una travesía que se me hizo eterna. Hasta la fecha iba a entrenar con un compañero australiano-argentino, Adrián.
Debí pegar al entrenador
Era un día cualquiera de la temporada 2002-03, Southampton. Habíamos entrenado en uno de los campos de la entrega extensiones de césped a poseía el Southampton FC a las afueras de la ciudad: el training ground. Incluso ya habíamos comido. Patata asada, pasta-chicken, tikka massala (no recuerdo ensaladas).
Ese momento mágico cuando vives en un país extranjero
Como ya comenté en entradas anteriores, aprender inglés fue una de las principales batallas a las que me enfrenté en mi camino hacia el debut -que nunca llegó- en la liga inglesa. Fue una batalla diferente a lo que se entiende como tal comúnmente; al principio la ansiedad por aprender aspectos específicos del idioma me bloqueó hasta el punto de no abrir a la profesora de inglés cuando venía a casa: Pánico.
La obsesión de los ingleses por el pan de ajo #Southampton
Cuando en el año 2001 fiché por el Southampton tuve que buscar una serie lugares habituales para cubrir mis ratos de ocio. Las discotecas las fui descubriendo gracias a los compañeros, el centro comercial era inevitable, pero los restaurantes me costaban.